Cada vez que os enseño algo hecho con lana afieltrada, hay alguien que me pregunta como hacer este tipo de trabajos. Eso, unido a que últimamente no me despego de la cámara de fotos a la hora de hacer manualidades, ha dado lugar a un buen lote de imágenes que bien podrían convertirse en un pequeño curso de como afieltrar lana con la técnica de la aguja. En el cual podréis ver como hago desde cosas sencillas, como el algodón de azúcar de mis muñecas, a piezas de bisutería o miniaturas.
Como buen curso que se precie empieza con la parte más aburrida pero imprescindible: conocer los materiales y herramientas con los que vamos a trabajar.
Para afieltrar lana, realmente sólo hay tres cosas imprescindibles: lana cardada o peinada, una aguja especial para afieltrar y una superficie de trabajo. Aparte,podemos necesitar otra serie de materiales y herramientas para proyectos determinados, pero la mayoría son cosas opcionales, que solemos tenerlas en casa o que podemos encontrar sin mayores problemas.
La lana:
Para la mayoría de los casos se emplea lana cardada o peinada para fieltrar. Tanto una como otra surgen del procesado de la lana, en le caso de la lana peinada se han eliminado las fibras cortas, por lo que suele dar mejores resultados que la lana cardada que aún las conserva. Para que os aclaréis son este tipo de madejas que cada vez se ven más en tiendas de manualidades y mercerías. Felthu es la marca más conocida.
También se puede fieltrar la lana hilada siempre y cuando no tenga un "tratamiento superwash" o "inencogible" (ah y siempre y cuando sea lana 100% y no alguna mezcla acrílica).
Agujas para afieltrar:
Son agujas especiales, que tienen unas pequeñas escamas que al clavarlas una y otra vez en la lana van enredando las fibras hasta compactarlas y convertir la lana en fieltro.
Estas agujas pinchan muchísimo, y hay que tener mucho cuidado a la hora de utilizarlas. No hay que perder de vista la labor ni un momento. Con que desvíes la mirada un segundo para echale un vistazo a la tele es suficiente para que ocurra un accidente.
Es interesante tener alguna aguja de repuesto, ya que rompen con bastante facilidad. Las agujas de afieltrar las puedes empuñar sin más, o utilizar alguno de los mangos que venden en le mercado. Existen mangos en los que se pueden colocar hasta 20 agujas, con lo que el tiempo que tardes en realizar una pieza se reducirá ostensiblemente. La marca Clover, comercializa unos mangos (como el verde de la fotografía) con un plástico que rodea a las agujas, ese plástico tiene un sistema pivotante , que hace muy difícil que puedas pincharte.
Superficie de trabajo:
Puede ser un trozo de espuma de al menos 5 cm de grosor, o un cepillo de cerdas firmes.
Como os decía el resto de los materiales dependerá del proyecto concreto. Son muy útiles los cortadores de galletas, palillos, palos de brochetas, fieltro plano... y todo lo que se os ocurra para embellecer vuestro trabajos (cintas, abalorios...)
Hasta aquí por hoy, el miércoles que viene, volveré con la segunda parte del curso: un tutorial muy facilito para perderle el miedo a la lana y las agujas.