Ante todo, y antes de nada, quiero daros las gracias. Gracias, a todos los que me
escribís preocupados o enfadados cada
vez que dejo el blog medio abandonado. A los primeros puedo aseguraros que
estoy viva y de una pieza, y que conservo la inmensa mayoría de los dientes y todas
las extremidades (tengo los pies un poco mordisqueados pero “esa es otra
historia y debe ser contada en otra ocasión”).
A los que me propináis cariñosos (o eso quiero pensar) tirones de orejas solamente deciros que tenéis razón, que soy una vaga y que debería escribir más a menudo. Tampoco tenía muchas cosas nuevas que enseñaros, aunque es cierto que hay un par de haditas diminutas revoloteando por el taller desde hace un par de semanas y se pasan el día cardándose el pelo, jugando al escondite dentro de las piezas de la vajilla y bailando entre las flores. Son tan chiquititas que les gusta columpiarse colgadas de mi cuello con una cadenita.
Trataré de actualizar el blog de forma más regular aunque ha llegado el momento de que asuma una de esas verdades incómodas. Por
más que me pese, nunca he sido demasiado buena manteniendo las promesas que me
hago a mí misma.
Cuando iba a la universidad, cada septiembre, daba un puñetazo (imaginario) en el escritorio y me decía: “Este curso se acabaron los agobios, voy a estudiar un rato cada día…” y la víspera del examen me ardían las pestañas para conseguir leerme todos los apuntes al menos una vez. Juré que nunca jamás le volvería a hablar a aquel amigo que se rió a carcajadas cuando su perro me destrozó los zapatos y tuve que volver descalza a casa y, aun así, el año pasado, le mandé una postal por Navidad.
Cuando iba a la universidad, cada septiembre, daba un puñetazo (imaginario) en el escritorio y me decía: “Este curso se acabaron los agobios, voy a estudiar un rato cada día…” y la víspera del examen me ardían las pestañas para conseguir leerme todos los apuntes al menos una vez. Juré que nunca jamás le volvería a hablar a aquel amigo que se rió a carcajadas cuando su perro me destrozó los zapatos y tuve que volver descalza a casa y, aun así, el año pasado, le mandé una postal por Navidad.
Cada mañana juro (y perjuro) que he terminado con el azúcar y que a partir
del lunes pondré sacarina en el té… mientras el bote de edulcorante me mira
desde la despensa con el precinto puesto desde hace más de un año. No paro de
decir que tengo que cortar las hierbas del jardín y, a este paso, tendré que
entrar en casa a machetazos. Siempre me propongo irme a la cama como muy tarde
a las diez y luego me quedo leyendo hasta horas indecentes.
Cuando termina cada
temporada de “True Blood” digo que será
la última que vea, ya que la calidad de esta serie hace años que descendió al
inframundo, pero, una vez más, sigo los capítulos al día. Este año cumpliré esa
promesa, por la simple razón de que la cancelan. ¡Qué le voy a hacer! Soy
incapaz de resistirme a una serie que empieza con “Bad Things”, ni a los
abismos de perversión que esconde la mirada de Alexander Skarsgard (“Skarsgard”
lleva un circulito encima de la segunda “a” pero no lo encuentro en el teclado).
También me digo que no volverá a pasar una semana sin que actualice el blog
y que tengo que preparar unas cuantas entradas y programarlas para evitar estas
sequías cuando me falta el tiempo o no tengo energías, ideas o ganas
suficientes y me siento anegada por la pereza. Promesas, promesas,
promesas…
Ay, como me reconozco en tus refexiones!! Las promesas incumplidas a mi misma, se me acumulan, aunque tengo que decirte que he conseguido por fin dejar el azúcar y pasarme a la sacarina, yuhuuuu :(
ResponderEliminarTus haditas encantadoras, como siempre. Besos y feliz verano!
Muchas gracias. Felicidades por lo del azúcar ¡eso hay que celebrarlo! ¿pastelitos? ;-)
EliminarNo me tientes...
EliminarYa sabemos todas que la mayoría de esas promesas nunca se cumplen :P yo creo que esa es precisamente su gracia, hay algo de imposible en ellas.
ResponderEliminarPor mi puedes seguir actualizando cuando mejor te venga, ¡aquí te espero!
Si es que las cosas realmente complicadas se van haciendo, pero esas pequeñas tonterías se nos atragantan... besitos
EliminarAcaba de desaparecer el comentario que te habia escrito!!!!!....¡¡¡¡ Hola!!!! Me encanta cada nueva entrada tuya, me hace sonreir , hago oidos sordos a las promesas que nos has hecho , el blog es para disfrutar, es igual que actualices cada día cada semana cada mes... lo importante es que no te sientas obligada y como dice Wasel actualices cuando mejor te venga... Yo tambien, aqui seguire. Las diminutas hadas con sus caritas pillinas me encantan !!!!!!;D Besitos.
ResponderEliminarEs realmente molesto cuando desaparecen los comentarios. Podemos ver si Benedict Cumberbatch está libre un día de estos. Besitos y feliz verano
EliminarEn alguna coincidimos, yo esta semana conseguí hacer y programar las entradas a tiempo asi que de momento voy bien, pero con lo del blog 100% contigo, mil ideas, pero cero tiempo y tambien mucha perezaaaa ........ en fin, esperemos ir mejorando poco a poco ;) Tus haditas monisimas por cierto! ;) Bscossss mil
ResponderEliminarSi es que sois muy disciplinadas, yo tengo asumido que no valgo para eso de las programaciones. Cuando escribo algo no puedo resistirme a publicarlo...
Eliminaresas haditas son monisimas , me encantan
ResponderEliminaryo tambien veo True Blood , me encantan los seres magicos y oscuros
y tambien me hago a mi misma promesas que despues incumplo descaradamente , asi que no estas sola
besitos
Mari
Si es que a veces lo mejor es mantener la boca cerrada, pero cada una cumplida es un logro para orgullecerse. Me encanta verte por aquí.
EliminarMe encantan tus hadas son muy bonitas y todo lo que haces. Me gustaria muchisimo que te pasaras por mi blog y me dieras tu opinión
ResponderEliminarhttp://elrincondesandi.blogspot.com.es/
Para allá me voy.
Eliminar¡Aiiis! Yo creo que "prometer" y "cumplir" son fuerzas opuestas ^^U Y cuando haces una, la otra huye hacia el lado contrario del mundo... jajaja ¡Ánimo!
ResponderEliminarLas haditas son un amor <3
Muchos besitos!
Como una fuerza imparable chocando contra un muro inamovible... Muchas gracias por visitarme. Un placer.
EliminarMuy buena idea las mini haditas en colgante, asi las puedes llevar a todos los sitios contigo^^
ResponderEliminarMe veo identificada, este último mes he estado desaparecida del blog, lo que dices de escribir post y programarlos va genial
Si es que a mi me puede la impaciencia. Si escribo algo tengo que publicarlo. De todos modos haré el intento. En verano está todo más paradito, pero seguro que con el fresco volvemos con más fuerza
Eliminar¿Quién no hace promesas y promesas y luego surgen otras cosas que te desvían la atención? Y no las haces porque no quieras, sino... porque realmente, en ese momento, no te apetecen. Llevo colocando las fotos de mis hijas... y sus dibujos, que los guardo toooodos.
ResponderEliminarEn fin, que me alegra leerte de nuevo y ver que sí que sacas algo de tiempo para hacer esas dos preciosas hadas. Un besazo
Es un bonito guardar todas las fotos y dibujos de los peques, merece la pena el esfuerzo. Besitos.
EliminarBueno bueno.....dichosos los ojos!!!! Antes de nada decirte que me ha encantado volver a leerte y poder ver tus ultimos bichejos traviesos!! Pero sobre todo....saber que sigues bien y que solo ha sido culpa de la pereza el no poder disfrutar paseandome por tu blog.Un besazo!!!
ResponderEliminarBesitos para ti también.
EliminarHe llegado a ti a través de una foto de instagram. He flipado con tus creaciones, aún tengo la boca abierta con la Bella y la Bestia y llego aquí y veo que has hecho la ansiada lámpara de tazas???????????????? Oh my god! Eres mi ídola desde ya mismo!!! Te sigo y me encanta haberte encontrado. ¡olé tú! Algún día también haré yo la lámpara, ¡te aviso!
ResponderEliminarPues pasa y ponte cómoda. Estoy deseando ver esa lámpara.
EliminarQué puedo decir? Diminutas pero grandiosas de lo bonitas que son.
ResponderEliminarPor aquí también andamos "vagueando", y es que esta época da mucha pereza el tener que andar tecleando, con la de cosas fantásticas que hay ahí fuera (y eso que el tiempo por aquí no está ayudando demasiado)